RESUMEN: Mientras Paulina se ducha en el
gimnasio se corta el agua. Paolo le
ofrece la ducha del baño de los hombres, Paulina acepta y al salir se encuentra
al italiano desnudo, ninguno puede evitar besarse y empezar a acariciarse….
Paulina se calentaba más al sentir la gran
polla caliente del italiano entre sus blancas tetas.
-Eso, pajéala con mis tetas...así, así…
-Eres tan ardiente, Paulina..
-Sí, muy caliente, estoy muy caliente…
Se metió la verga del italiano en la
boca. Apenas le cabía.
-Chupa, bella, chupa…
Paulina le pasó la lengua de arriba abajo
haciendo estremecer al italiano
-Uf, eso…
Volvió a metérselo a la boca y empezó a
chupar disfrutando de aquel momento.
Paulina volvió a tenderse y el italiano se
montó sobre ella.
-Métemelo, Paolo, quiero sentirlo, quiero
tu polla dentro de mi…¡La quiero toda!-
Poco a poco la verga del italiano fue
adentrándose en el coño de Paulina
-UUF..ES TAN DURA,..ES TAN DURA…
El italiano empezó a penetrarla y Paulina
gritaba pidiendo más, no controlaba sus gritos confiada en que el gimnasio
estaba vacío a esa hora.
-¡Métemelo todo, Paolo…AAAY…AAY…así,
así…Toda…la quiero completita…
Ahora fue el quien se tendió y Paulina se
montó sobre su verga
-Mmm…
-Muévete, Paulina-
Paulina empezó a cabalgar sobre la verga
del italiano, sus grandes tetas se movían de un lado a otro mientras el sudor
comenzaba a bañar su blanca piel.
-AAAY..PAOLO..ERES TAN RICO..AAAY…
Paolo le masajeaba las tetas y chupaba sus
pezones, eso volvía loca a Paulina
-Sigue chupando, eso...Eso, chupa mis
tetas–
Paulina no dejaba de moverse, todo su
cuerpo se estremecía al sentir esa dura polla dentro de ella.
-Ahora por el culo- pidió-
Se puso en cuatro patas y paró bien su
culazo
-¡Métemela por el culo, hazme gritar de
placer!-
El italiano obedeció y metió su polla en el
estrecho culo de Paulina
-AAAY..
Era tan grueso que apenas le cabía
-AAAY… ES TAN GRUESA…
A Paulina le llegaron a salir lágrimas
- UUY..ES TAN GRANDE..ES TAN GRANDE…
Sentía una mezcla de dolor y placer, pero
seguía pidiendo más:
-Sigue...Sigue…Duro, bien duro...rómpeme el
culo con tu wea-
El italiano metió su polla más adentro y
Paulina aullaba de placer
-TODAA..LA QUIERO TODA..
El italiano empezó a moverse, su polla ardía al interior del
culito blando de Paulina.
-¡Rómpeme el culo, papito, rómpeme el culo
con tu tremenda wea! -
El italiano le pegó un palmetazo en los cachetes del culo
-AAY..ESO, TRATAME MAL, SOY UNA CALIENTE..
De pronto a Paulina le parecio escuchar
voces, pero no hizo caso y siguió disfrutando de aquella polla.
Hasta que el italiano acabó dentro de ella
-Que rico...
Quedó empapada de sudor.
Paolo le dio un beso
-Rico- le dijo ella
Pero después de ducharse Paulina empezó a sentirse
arrepentida por lo que había hecho
-No debí hacerlo-
Al salir se llevó una sorpresa: había gente
en el gimnasio y habían escuchado sus gritos de placer
Continuará