La lenka llego con unas patas negras bien apretaditas que la hacian ver mas rica de lo que era.
fuimos a pasear y cuando llegamos al bosque me la agarre.
nunca habia tenido sexo en el pasto, fue una buena experiencia.
Segui viendome a escondidas con la lenkita, esto de ser patas negras era muy peligroso.
por la noche, despues de ver a la aurelia me iba a la casa de la lenka, como el marido trabajaba de rondin en la noche , teniamos chipe libre hasta el amanecer.
asi que le daba como caja a la tonta.
o a veces nos ibamos a coquimbo a los moteles.
que buenos dias aquellos de peligro y sexo.
Aburrido de estar en la balsa renuncie y me fui a puerto velero de jardinero, bajo las ordenes del chato acuña, un viejo gordo y culon que respiraba jardin, trabajaba de lunes a lunes alla y le gustaba que todos los demas hicieran lo mismo.
pronto lo mandaria a la chucha
CONTINUARA...
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