lunes, 3 de octubre de 2016

El diario secreto de Zaida, capitulo 24

RESUMEN: El Alfredo me invita a cenar supuestamente para limar asperezas, me lleva a un motel y cuando estoy desnuda en la cama aparecen tres tipos....


Los weones eran altos y musculosos, tenían pinta de ser de otro país. 
-¿Qué wea?- le pregunté al Alfredo
-Ahí la tienen- les dijo
-¿Qué wea?-
Dos de los hombres me sujetaron
-¿Que wea pasa? ¿Qué quieren, mierda?-
-Lo siento, zaidita, pero no puedo permitir que sigas en nuestra casa-
El tercer hombre me puso un pañuelo impregnado con algo en la cara, tenía un olor extraño
-Que...
Me empezó a dar mucho sueño  y lo último que escuché fue la risa del Alfredo.
Después me quedé raja.


Desperté en una pieza muy elegante rodeada de lujosos adornos y muebles y con un baby doll blanco puesto  
-¿Que chucha? ¿Y esta wea? ¿Dónde estoy?-
Un weon narigón entró a la habitación  
-Señorita Zaida, por fin despierta-
-¿Quien chucha soy vos, feo culiao?-
-¡Que boquita! parece que tendremos que enseñarle un poco de modales-
-Responde ¿Quien soy vos? ¿Dónde estoy?-
-Mi nombre es Rahmej Salim y soy servidor del sultán, usted ha sido traída al sultanato de Yamán -
-Ra..¿Qué wea? ¿Sultán? no entiendo ni mierda-
-Alfredo te ha vendido al sultán de Yamán-
-¿Qué wea? feo culiao, pero si él no es mi dueño-
-Te vendió a cambio de una bolsa llena de oro-
-Tengo que salir de aquí-
El weon me agarró:
-Yo que usted mejor no haría eso,  afuera hay hombres con sables que no dudarían en cortarla en pedacitos si se los ordeno-
-Tengo que salir de aquí, tengo que volver a Chile-
-Eso lo tendrás que hablar con el sultán- 
-¿Dónde está ese weon?-
-Primero debes ponerte ropa adecuada-
Me pasó un vestido largo
-Vístete, rápido-
-Ya va a ver ese sultán culiao quien soy yo, me va a tener que devolver a Chile o le saco la chucha-
El narigón salió para que me pudiera vestir.

Después me llevó ante el sultán
-¿Dónde está ese viejo culiao?-
Pero no era na viejo el weon; era tremendo hombre, alto, morenito, musculoso.  Casi mojo mis calzones de pura caliente cuando lo vi.
-¿Esta es mi nueva esclava?- preguntó con voz profunda
-Uy- le dije-si, papito, soy toda tuya, hazme lo que queray-
-Es un poco irrespetuosa-
Estaba sentado en un lujoso trono
-Ojalá se pare pa ver de qué porte lo tiene- pensé-apuesto a que tiene la media wea, estos árabes son famosos por lo pichulones-
-Acércate, esclava- me dijo
Me acerqué un poco
-¿Cómo te llamas?- me preguntó 
-Zaida, pero vos dime zaidita-
Me tomó la mano:
-Vamos a pasar muy buenos momentos juntos, Zaida-
-Uy, jijiji, eso es lo que quiero, mijito-
En ese instante no me importaba ni una wea estar lejos del país, lo único que  quería es que ese mijito rico me hiciera cagar con su wea
-Que  Zaida coma- le ordenó a su sirviente - después llévala a mi habitación-
-Sí, señor-
-Lo único que quiero comerme es tu verga- le dije- quiero devorármela entera-
Noté por fin el gran bulto en su entrepierna, el mito era cierto; los árabes son muy bien dotados 
-Ve a alimentarte- me dijo
- y a tomar harta agua-pensé-porque de seguro este weon es más cachero que yo, me va a dejar con la lengua afuera-

Continuará..  

No hay comentarios:

Publicar un comentario