RESUMEN: Julián continua haciéndose pasar
por un profesor en el pueblo, su único objetivo es acercarse a Ana María, su
prima y de quien se ha enamorado...
Pasaron las semanas y Julián ya se había
acostumbrado a su vida como profesor,
los niños le tenían mucho cariño y le ponían empeño para estudiar, por otra
parte, la tranquilidad del pueblo le sentaba muy bien; se respiraba un aire de
verdadera paz y eso lo relajaba.
-Esta es una segunda oportunidad que me
está dando la vida- decía a menudo
Hasta el momento no había tenido
oportunidad de conocer a Bernardo el novio de Ana María, el tipo había alargado
su viaje por un par de meses más.
-¿Te has enamorado alguna vez, primo?- le
preguntó Ana María un día en una de sus tantas platicas.
Por un momento Julián no supo que decir,
cuando era niño le gustaron algunas vecinas, aunque nunca tuvo mucho éxito con
las mujeres, tampoco se había enamorado pues pasaba su tiempo robando o fumando
en las esquinas. Nunca se había sentido atraído por nadie, hasta que apareció
Ana María, aquella prima a quien conociera pequeñita y que ahora estaba hecha
toda una mujer.
Un amor más que prohibido.
-Una vez- respondió el- solo me he
enamorado una vez-
-¿Y qué pasó?-
-Ella no me correspondía-hablaba mas
refiriéndose a ella, sabía que las posibilidades de que se fijara en él eran prácticamente
nulas-¿Quien se fijaría en un delincuente? nadie quiere como pareja a alguien
que ha estado en la cárcel-
Ana María le tomó la mano y se quedó
mirándolo:
-Lo importante es que ahora estas
intentando empezar de cero- le dijo- ya llegará una mujer que te quiera-
Aquellos ojos lo tenían hechizado, no eran
azules, pero para el eran el cielo.
Por un momento le pareció que Ana María le quería decir algo mas, abrió su boca, pero prefirió
callar
¿Que era?
Soltó la mano de su primo y volvió a sus labores
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